sábado, 8 de agosto de 2009

Las vacaciones!

Ah, las vacaciones!!! Ese momento maravilloso y esperado desde que tenía como 4 años. Esa pausa en la rutina, en la cotidianidad de mi vida para pasear, reír, jugar libremente por 2 largos meses. Las vacaciones en la vida de los niños son como una huella imborrable, el momento en que mamá y papá hacen una pausa, y para que "no te aburras" te llevan al cine cada miércoles, a museos los días gratuitos, al parque cuando no hay nada que hacer y a la feria cuando es 2 x 1.
Oh, sí!! Esas si que son vacaciones. Y como buena madre, no podía dejar de cumplir con mi misión, haciéndo con Kía todo eso que nunca hacemos por estar muy ocupados con la rutina. Ahora que ya camina, salta, corre y juega, lo único que quiere es andar del tingo al tango. Y  nosotros lo único que podemos hacer es seguirle el ritmo. Estás vacaciones, por lo tanto, hemos hecho:

1. Ir a los juegos de la alameda. Subirla a las resbaladillas, a los grillos saltarines, a los columpios que no le gustan y a los tubos de colgar.

2. La feria. 1 sólo juego en día normal y varios más el jueves a mitad de precio! Se subió a los tractores, que fue l que le encantó, a los caballitos, que no le gustaron hasta el final, al tren, donde lo divertido era asomarse a buscarnos o hacerle cosquillas, al carrito de meteoro donde hacía escándalo tocando el claxón, a la oruga, junto con su papá, pero no aguantó más de 2 vueltas. Y a alguno más que ya no me acuerdo!
3. El papalote museo del niño y la MegaPantalla. Entramos a la megapantalla a ver Animalópolis!!, (los signos de exclamación es por que así lo decían ellos) y a Kía le encantó, como todo lo que tiene que ver con animales. Aplaudía cada que finalizaba una escena y bailaba junto con los animales que eran bastante musicales. Después entramos al museo, al principio creí que Kía no lo iba a disfrutar, pero lo explotó al máximo y se divirtió como loca. Había áreas exclusivas para bebés y fuimos de una en una viendo como se divertía, subiendo a resbaladillas, apretando cosas, uniendo bloques, brincando en las zonas con colchón y trepándose a cuanta cosa pudiera. La única parte que no le gusto tanto fue el árbol Ramón, pues era una tediosa explicación, solo con el fin de llegar a la copa y tirarnos del tobogán y la resbaladilla juntos.

4. La alameda. otravez. Es gratis, está cerca y a Kía le gusta. Se subió a un tombling, gratis por que no había quien atendiera, y brincó mucho. Dimos una vuelta por ahí y se volvió a subir a los juegos.

5. La granja. Sabemos que a Kía le encantan los animales. Si ella pudiera tendría un zoológico en casa, pero ya que no puede, pues la llevamos a una granja, donde habían caballos, conejos, puercos, cabras, vacas, borregos, patos, gansos, pollos, gallos y gallinas. Y el estelar un perro que se llamaba Tobi, que andaba suelto y por él que Kía ignoró a casi todos los animales..... Les dió de comer a los conejos, se subió al caballo, pero no le gustó nadita y lloró. Vió como ordeñaban a la cabra y la acarició muy emocionada. Se quería meter con los borregos. Le gustaron el pollo y el pato, pero solo adentro de la jaula. A las gallinas las llamaba como perros. E hizo un borrego con lana. (Bueno, lo hizo el papá, ella mientras correteaba al perro, gritando Tetaaaa, tetaaaa). Jugó en una casita y al salir comimos quesadillas riquíiiismas, ella se comió una completa de champiñones, después vimos a una víbora de cascabel de un año... susto!

6. Las lagunas de Zempoala. Como la granja era en el camino hacia cuernavaca, ya que andabamos tan lejos decidimos seguir más, a ver que encontrábamos. Y después de media hora un camino lleno de curvas y un precipicio peligroso, llegamos a las lagunas. Que más bien es 1 laguna, pero que está bonito. Llegamos ya un poco tarde así que no nos subimos a las lanchas, ni montamos a caballo, tampoco pescamos, pero si nos subimos al columpio, dieron vueltas en la rueda esa, se subió a la resbaladilla y nos acostamos en el pasto a oír la nada pasar.


7. El parque, 2 veces a la semana. Cuando no salimos a ningún otro lado, para que se distraiga, corra, se estire y se duerma más tarde!!

8. Coyoacán y los Viveros. Bueno, los viveros y comer en coyoacán. Comió flautas de barbacoa y quesadilla de papa, que le encantaron. En los viveros ya no alcanzamos a comprar cacahuates, así que tuvimos que ir buscando en el suelo, y en los escondites de las ardillas para que ella las pudiera alimentar. Le pusimos un cacahuate en la ramita, pero cuando la ardilla se acercaba Kía le aventaba el cacahuate con todo y ramita... Ya después quiso darles ella con la mano, pero cuando la ardilla se acercaba demasiado, le aventaba el cacahuate antes de que el pobre animal lo atrapara. La forma en que lo logró fue llevando a la ardilla hasta el piso, ahí aunque aventara el cacahuate, la ardilla si lo podía agarrar. Y Kía le gritaba A-a-aaaaa, osea Ar-di-llaaaa.

En fin, han sido unas buenas y provechosas vacaciones, y espero que las fotos le recuerden a mi hija que desde chiquis la llevabamos a pasear.

2 comentarios:

  1. hola pawsita.. no sabía que tenías blog.. solo pasaba a sakudarte y decirte que tu nena está hermosa :) y qué bonitas vacaciones han tenido... saludos :)

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  2. Kia está hermosa,

    te paso este link, tienen una biblioteca de auto ayuda, ahi encontraras lo que buscas, http://groups.google.com/group/forovivirlibre?hl=es

    estan en la sección de archivos.

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