Quieren saber que tan gordis está Laia????

Lo suficientemente gorda para que se desarrolle el siguiente diálogo.....

Papá: Kía, dale un beso en el cuello a Laia!!
Kía: Cuál papá???
Papá: Aquí, en su cuello...
Kía: No papá.... no tene!!!!!!!

Ni que decir.... los niños y los borrachos, siempre dicen la verdad!

Todo lo que dije que no iba a hacer.....

De niñas(os) siempre soñamos con el día que seremos mayores y dueños de nuestra vida. Más aún, soñamos con el momento en que seremos padres y lo buenos que seremos, las cosas que jamás diremos y todo lo que vamos a permitir. Toda mi vida viví soñando con lo mucho que mis futuros hijos me iban a amar, pues yo jamás diría "ponte un sweater, por si acaso!"... Pero o desilusión, la adultez llegó, con ella mi maternidad y por desgracia, vino acompañada de la necesidad imperiosa de ponerles a mis hijas sweateres, por sí acaso.

Que trauma!!!!! Todos los días lucho contra mi subconsciente para impedir que las frases de mi madre salgan a flote..... Como esta, que a mi ya mis hermanas nos encantaba...

-Cierrate el pecho!-

Que que???? osea, uno va por la vida con el pecho abierto? Tripas, corazón y pulmones al descubierto?? En ese caso si que sería un buen consejo... Pero no, ella en realidad se refería a taparse el pecho para no enferse... que por cierto, nunca me pasó, a pesar de traer siempre el pecho abierto... O_o

-Quitate el pelo de la cara!-

Una de las cosas favoritas en la vida de mi madre, era cortarnos el cabello a mis hermanas y a mi. Desde nuestro nacimiento, hasta que tuvimos la capacidad de escapar y escondernos, mi mamá nos cortaba el cabello lo más corto posible, y si era de "hongo", mejor. Corto, fácil de peinar, con suficiente fleco para que supieran que eramos niñas, pero no tan largo que no lucieran nuestros ojos. Cuando tuve uso de razón y deje de permitir esa barbarie, deje de cortarme el cabello cortito y el fleco por encima de los ojos. De hecho mi peinado favorito era el cabello suelto con 2 "cuernitos" al frente. No de lado, no delgaditos. No. 2 gruesos mechones, justo al frente, que pasaran justo delante de mis ojos, ahí donde me impidieran la vista, para deleitarme con la dulce retahila de mi madre. "Quitate el pelo de la cara!! Que no se te ven los ojos, con lo bonitos que son tus ojos. Van a creer que no tienes... Un día de estos te vas a caer por que así no ves nada." Y cuando por fin me levantaba el cabello, "mira que bonita estás! si hasta se te ve la cara, y yo que creía que no tenías ojos... si no hay nada que esconder, así hasta te ves decente!" Gracias mamá... ahora nunca me dejo el cabello en la cara, no vayan a pensar que me gano la vida vendiendo medias horas de placer... Y sin embargo, el karma es un cabrón y hoy con 2 hijas, tengo que andar atrás de Kía tratando de que se deje recoger por lo menos el cabello del frente...

-Ahorita es ahorita!-

Frase sabia de mi madre, no? Pero es que si que debimos desquisiarla. No se de donde nos vendría la costumbre (muy probablemente la oímos primero de ella...) Pero cada vez que nos pedía hacer algo, había algo de mayor importancia que nos lo impedía, y la respuesta automática a su pedido era "ahoritaaaa..." Pero aún estabamos con la última "a" cuando mi mamá ya estaba a un lado jalandonos de las orejas, los pelos o lo que lograra pepenar, diciendo "ahorita es ahorita!!!". Nada mejor que eso para comprender el presente perfecto.

-Enderzate!! que te va a salir joroba...-

Dado que las que me leerán son en general madres, estarán de acuerdo con que está frase encierra la verdad de la vida. Claro que nos preocupa que a nuestros niños no les salga joroba. Pero llega una cierta edad, en la que el cuerpo empieza a cambiar, y las tetas, si -esas de las que ahora nos vanagloriamos y orgullosamente sacamos al aire- nos avergüenzan. Por lo tanto, la necesidad de pasar desapercibida, así como la ley de la gravedad que nos atrae hacia el suelo, nos impulsan a permanecer encorvadas. Pero mi madre de esas cosas no entiende, ella utilizaba frases para aterrorizarnos del estilo: "si sigues así te va a salir joroba", "por que crees que tu tío tiene un bulto en la espalda?", "sigue encorvandote y te voy a poner la mochila todo el día a la espalda", "hombros atrás, pecho levantado y mirando al frente como si fueras princesa" (esto después de haber visto "el diario de la princesa", creo que mi mamá sacaba provecho de cualquier cosa para darme una lección). He de admitir que finalmente sus efuerzos dieron resultado, hoy por hoy, camino derecha, vista al frente, hombros atrás y tetas al aire... Que no era así???

Peeeero, esta era una de las mejores... Situación: se me va el agua, la leche o la saliva de lado. Comienzo a toser como desquisiada, tratando de que el líquido retome el buen camino. Mi madre, al otro lado de la mesa, me empieza a dar instrucciones:

-respira por la naríz, jalate las orejas, ve hacia arriba, levanta las manos, pegate en la espalda, pegate en el pecho, no tosas, levanta la cara, no te rías, respira por la nariz!!!-

Si, todas estas indicaciones las da en menos de 30 segundos, mientras me mira ahogarme del otro lado de la mesa, sin intervenir de manera alguna... Ella quería ser médico... que bueno que no lo fue por que ya le hubieran quitado la licencia...

Y lo mejor de todo, es que con cada día que pasa, todas las cosas que en mi juventud dije que no haría -ni diría- igual a mi mamá, las hago y las digo, porque son parte de la maternidad.... Ustedes recuerdan alguna de estas frases celebres???

Y los dejo... por que le pedí a Kía que viniera y me contestó que "ahorita..."

5 meses!!!!

Increíblemente ya llegaste a los 5 meses!! No puedo creerlo, simplemente me parece que fue ayer cuando llegaste a nuestras vidas.

Pero... es indiscutible, tienes 5 meses de vida y se nota a leguas en tu tamaño, en tu desarrollo, en lo vivaracha que estás!

Estando boca abajo ya dominas a la perfección la girada. Lo cual supone un nuevo riesgo y la imposibilidad de dejarte sola en casi ningún sitio.

Ya levantas tu pechito en tus brazos bien estirados. Pero si quieres agarrar algo, te dejas caer sobre tu pecho para poder usar tus manos. 

Ya te sientas!! perfectamente erguida, no te vas ni para atrás ni para adelante, pero de repente si pierdes el equilibrio y te caes de lado o, mejor aún, te enojas y te avientas hacia atrás.

Recién cumpliste los 5 meses, empezaste a "hablar" muchísimo! Antes ya balbuceabas bastante, algunos agu y otros agggs, pero la mañana de tu cumplemes, me despertaste con una amena charla de abubu-babas y más. Con risas y pausas incluídas. Y no solo eso, pero es que ya también discutes! y te quejas de todo lo que tu hermana te hace!

Que por cierto, aunque tu hermana es la que más "mala vida" te da, tu estás loca por ella, la amas con locura y la idolatras. Te saca miles de carcajadas con sus payasadas, y ella se alimenta de tus risas.

Estás increíblemente bella y nos traes a todos locos con tus sonrisas.

Un poco de.... teatro!!

Oh si, esta semana estuvo muy cultural!! He de confesar que mis papás crearon un monstruo (especialmente mi mamá). Me crió en el feminismo, y la intelectualidad. Desvalorizando la superficialidad de la imagen común de la belleza y alabando la superioridad del intelecto. Así que, con esa madre crecí, esa que no me dejaba ver televisión, esa que nunca se quedó a cuchichear con otras mamás a la salida de la escuela, esa que en vez del TVynovelas, leía libros y que en vez de mandarnos a cursos de verano, nos llevaba a museos.

Oh, si...... con esa madre loca, ratona de biblioteca crecí. Y me dejo atrofiada!! Pero me gusta el curso que tomó mi atrofiamiento y le agradezco infinitamente haber puesto "Mujercitas" en mis manos, antes que dejarme ver a Bibi Gaytán y Eduardo Capetillo bailando....

Es por eso que decidí ser psicóloga, alimentar mi mente, hincharla de información. Y es por eso que decidí ser una mamá intelectual y llenar a mis hijas de cultura.

Teniendo tan sólo 2 años y 4 meses, respectivamete, puede llegar a ser difícil acercarlas a la cultura, más nunca imposible, con la cantidad inmensa de libros que tienen a la mano y las búsquedas incazables que hace mamá en internet.

El lunes fue nuestro primer día de teatro. En punto de las 11 de la mañana las trepé al coche y nos fuimos al teatro Isabela Corona a ver UGA una obra infantil que enseña el lenguaje de señas, que reúne música e imaginación para darles a los niños mucha diversión! Sobra decir que Kía estaba encantada, gritaba, se asombraba, se reía y aplaudía emocionada. Y Laia, ni que decir, nunca se es demasiado joven para aprender, y ella lo disfrutó también de principio a fin, haciendo ruidos y agitando sus piernitas con locura. Salimos las 3 encantadas del teatro, que nos dió tema de conversación para todo el regreso, la tarde y casi la semana completa. Uga fue un hit con Kía!!

Pero el encanto de Uga terminó el viernes, cuando fuimos a ver En duende está el misterio, bueno.... decir que nos encantó es poco... de hecho yo parecía niña chiquita junto a mis hijas. Es la historia de, adivinaron, unos duendes, música, magia, luces y todo narrado en "idioma duende", increíbemente todo se entiende....

En un momento salimos Kía y yo al baño y un duende estaba afuera, Kía estaba impactadísima, me decía "nuende? nuende?" Y el duende seguía en su papel... bueno increíble de verdad, tan feliz estaba de ver a mi hija, que se me olvidó tomarle foto! =S

Después los duendes bajaron por algunos niños para que subieran a bailar al escenario, naturalmente, invitaban a niños mayorcitos. Pero Kía estaba desesperada por ir, como estabamos en la orilla de la fila, la deje que fuera, para cuando llegó a la escalerita ya los niños iban para abajo, pero Kía se quedó paradita en frente del escenario gritando "ooooh!! y aaaaah!".

En fin, que nuestra semana de teatro fue un éxito, y por su puesto dio tema para toda una semana de platica, y para una nueva afición por los duendes y hablar en "duende".

Mi experiencia con la lactancia!

Este post es para seguir la celebración de la semana mundial de la Lactancia Materna!! Si, ya se que terminó hace 4 días, pero cualquiera que sea mamá de 2 hijos pequeños, sabrá que apenas pude lograr terminar el post.
La lactancia... Si, esa en la que me inicié hace 2 años y 4 meses. Esa de la que me informé desde mi embarazo. Esa que le ha dado tanta salud a mis hijas y tantas satisfacciones a mi.
Como ya saben, hace 2 años y casi 4 meses llegó a mi vida un hada, a darme luz y las alegrías más inmensas. Parte de estas alegrías llegaron a través de la lactancia. Por que lactar es.... todo lo mejor que podría hacer por mis niñas.
Establecí mi primera lactancia a la hora y media de nacida Kía. La señorina estaba demasaido cansada después de un agotador parto y decidió que mejor se dormía en vez de comer. Una enfermera malvada nos dijo a mi marido y a mi, que si la bebé no comía, tendrían que darle suero glucosado, tratando de asustarnos. Yo, por suerte estaba informada, pero sin embargo me deseperaba de que la nena no quisiera ni abrir la boca, pensando en las mil cosas que podrían pasar si no comía.
Gracias a Dios el instinto pudo más y tras varios minutos de sentir el pezón en la boca y olerme, por fin comió. No los 15 minutos de cada seno reglamentarios para la enfermera, pero, eso la enfermera no lo tenía que saber.... jaja.
De ahí en más nuestra lactancia fue perfecta. Horas pegada a ella, contemplandola, sentirla junto a mi piel, verla abrir los ojos por primera vez, respirar su aroma y sentir su calor. La lacté de forma exclusiva durante 6 meses, sin problema alguno.

Mi abuela aún dice que tuve mucha suerte de haber tenido un parto y lactancia tan buenos, yo no lo llamo suerte, lo llamo información. Teniendo Kía 5 meses, regresé a la Universidad. Un gran reto para nuestra lactancia, pero mi mejor arma seguía de mi lado. Con toda la información y apoyo que tuve de las redes virtuales, logre establecer mi lactancia extrayendome leche en la escuela y al llegar a casa. Era caótico, vivir contra reloj, extraer leche encerrada en un baño, en tan solo 10 minutos, dejarla en el refri de la cafetería. Conservarla para llegar a casa de mi hermana. Extraerme mientras Kía mamaba del otro lado. Si, el caos es una constante de mi vida, pero, gracias a la locura que me orilló a ser una pumping mamma, Kía siguió lactando, sin tomar nunca ni un sólo biberón de fórmula.
Teniendo Kía 1 año 3 meses, quedé embarazada. Nuestra segunda ilusión venía en camino, y tuve que enfrentarme a mil comentarios "bien intencionados", pero seguí constante en nuestra decisión y Kía siguió tomando leche de mamá.
Llegó un momento en que fue verdaderamente difícil, la sensibilidad de los pezones, aunado a la necesidad de Kía de mamar más y más me estaban dejando harta. Las noches eran interminables con ella pegada a mi, cada vez sentía que tomaba más desesperadamente, y yo cada vez tenía menos leche por la revolución hormonal del embarazo.
Sin embargo, seguimos al pie del cañón. Nunca desistí, gracias al apoyo de mis amigas virtuales. Y sin embargo, mi miedo al tandem, hizo que orillara a Kía a un destete, a los 21 meses. Fue sin dolor y sin sufrimiento. Sin embargo, ahora me doy cuenta de que no estaba lista.
Después de 3 meses de no usarse, mis tetas fueron re-inauguradas tras el nacimiento de Laia. Ese que fue un hermoso parto en casa, me dió la oportunidad de lactar a mi hija en cuanto la tuve en mis brazos. Tomo la teta por primera vez con menos de media hora de nacida y de ahí nunca más la ha vuelto a soltar.

Es una experiencia maravillosa haber lactado desde hace 2 años, 4 meses, casi ininterrumpidamente. y sobre todo, experimentar la maravilla de lactar a mis 2 hijas juntas. De tener la posibilidad de darles esta experiencia, que significa una mayor unión entre ellas, pero de esto, ya hable aquí.
Definitivamente, estoy convencida de que la Leche Materna es lo mejor para los bebés, y también para las mamás.

Mi hada dulce....