sábado, 12 de noviembre de 2011

Teatro portátil!

Una de las cosas que la filosofía Waldorf maneja, y que me gusta mucho, es que en vez de leerles un libro a los niños, se los presentamos de alguna otra forma, ya sea dibujandolo, representandolo o con títeres. Esta última, es mi manera favorita, y la de ellas también!
A ellas les gusta interactuar con los personajes, interrumpir de vez en cuando la obra para preguntarle algo a un cerdito o para gritarle al lobo.
A mi me gusta poder adaptar la historia, contarselas con palabras que entiendan, dirigirme directamente a ellas, y sobre todo, me gusta hacer los títeres!

Y, para ser sincera, cuando se es mamá de tiempo completo, y 1 sólo sueldo es el que mantiene el hogar, ese tipo de gastos no estan en nuestras posibilidades o prioridades.

Así que, un día, empaquetando algo, llego a mi una caja de carton muy resistente, y al verla, se puso en marcha mi parte creativa.
Forre la caja completa, y con la tapa de una caja de zapatos hice el escenario y lo pegué a la caja. No se sostenía recto por completo, así que con unas pinzas para la ropa, lo colocamos en su lugar cada vez que lo usamos.



La mobilidad del escenario permite que se guarde dentro de la caja.



Y al guardar todo, queda una cajita compacta, fácil de llevar a casa de la abuela o al parque.



Y, como no podían faltar los personajes, me encargué de hacerles algunos. Los primeros fueron del cuento de caperucita roja. Dibujados, coloreados y enmicados por mi. Les pegué un abatelenguas detrás y estuvieron listos para representar su papel.



También les hice hadas con dedos de guantes y otros más de papel. Cuando el tiempo apremia y quiero contar una historia, hasta pintarles una carita a mis dedos funciona para divertirlas!!

Hacer esto me dejo una enorme satisfacción, descubrir el placer de lo hecho en casa, lo reciclado, lo imaginado y lo creado. Salirse de la vertiente consumista por una vez y crear con las propias manos, hace sentir bien.
Y verlas jugar, con lo que mi imaginación ideo para ellas, se siente mejor!











martes, 8 de noviembre de 2011

Ciclo de vida de la mariposa

Hace unos meses leí éste post del blog de Laura. Y sentí, la más verde de las envidias. Encontrar una oruga en la comida y sacarle provecho a la situación, en vez de gritar del susto, es algo que no hacía/veía desde mi infancia. Y cuando la leí, y vi las posibilidades que ese hallazgo les presentaba, sentí celos y desee que me hubiese pasado a mi.

Jamás creí que los deseos se cumplieran tan fiel y rápidamente. Sin embargo, una semana después, mientras comíamos, mi hermana descubrió una oruga verde y hermosa en su servilleta. No lo podía creer!! Estaba extasiada, emocionada y fuera de mi. De pronto se abrió un mundo de posibilidades de aprendizaje para con mis hijas, para mi fue una oportunidad única de que observaran la naturaleza y uno de los mayores milagros de la vida en acción.



Así que guardamos a la pequeña oruga en una cajita de plástico transparente, le hicimos hoyitos y nos dedicamos a observarla de vez en cuando el resto del día. Al día siguiente, emocionada, Kía se levantó y lo primero que hizo, fue buscar a su oruga. Cuando nos asomamos a verla, la vi inmóvil y lo primero que pensé fue que estaba muerta, pero cual fue mi sorpresa al abrir la cajita, y descubrir que si, estaba inmóvil, pero dentro de lo que parecía una telaraña!! La oruga había hecho su capullo y se había acomodado para transformarse.



No lo podía creer y Kía no lo podía entender, me apresure a buscar recursos en la web para guíarla por este nuevo proceso y me descubrí con un folder lleno de hojas impresas de actividades de todo tipo. Esto nos mantuvo ocupadas mientras esperabamos a que el proceso terminara y nuestra mariposa saliera.

Los días se le hicieron largos a mi niña, esperando a que su mariposa decidiera salir. Por momentos dude de que se lograra el ciclo. No tenía idea de que condiciones debía reunir el medio para que la transformación se diera. Frío o calor? Sombra o sol? Con plantas o sin plantas? Investigue todo lo que pude y le dimos tiempo.



El capullo ya vacío, después de que saliera la mariposa.

Finalmente, después de casi 2 semanas, un sábado llegamos en la noche después de pasar todo el día fuera, y mi esposo descubrió, que un animalito volaba dentro de la cajita. Que emoción!! Parecía yo niña con juguete nuevo. Me apresure a hacerle fotos desde todos los ángulos posibles y a observarla detenidamente. Las niñas ya estaban dormidas y no quisimos despertarlas, pero era SU mariposa y no me sentía capaz de liberarla sin que antes la vieran, pero no creí que aguantara toda la noche encerrada. Decidimos tomarle más fotos y video y liberarla dentro del baño.


A la mañana siguiente les contamos el feliz acontecimiento y corrimos a buscar a nuestra amiguita al baño. Y no la hayamos por ningún lado.... Dejamos el baño abierto por si decidía salir de su escondite y esperamos... Hasta que apareció!!!!


Kía la vió y se le iluminaron los ojitos!! Parecía que la había gestado y parido ella! Las 2 se pusieron como loquitas, Kia le buscó nombre y no dejo de mirarla por un buen rato. Pensé en liberarla, pero creo que prefirió el calorcito de hogar, al aire frío del exterior, porque no se despegó por nada de la ventana.

Confieso que la primera vez que la vi, pensé que era fea.... Yo esperaba una hermosa mariposa, de colores brillantes y alas despampanantes. Ya de mínimo, una de esas tan comunes mariposas blancas de jardín. No esa fea criaturita color gris pardo, con alas rugosas y afición por los focos. Pero cuando vi los ojos de mis hijas iluminarse, me di cuenta de la pureza e inocencia de mis hadas, para ellas, la belleza estuvo en presenciar el milagro de la vida!!


-- Desde Mi iPad

Lo que ya es nuestra familia