martes, 23 de marzo de 2010

Jugando a las muñecas

Cuando era niña, tenía un montón de muñecas. Barbies sobre todo. Y la vida era muy fácil. No importaba cuantas “hijas” tuviera, siempre había tiempo para todas. Si me cansaba de una, solo la dejaba “durmiendo” o “platicando con su amiga”. Nunca estaban desatendidas. No había que preocuparse por el continuum, el apego y la teta a demanda.
Niñas, la vida real no es tan sencilla. Deberían poner esa leyenda en las cajas de las muñecas.
Ya son 9 días desde que Laia llegó a casa. Han sido días emocionantes, llenos de emociones, de conocernos, acoplarnos, entrar a la rutina, y acoplarla a ella.
Hasta el sábado, las cosas habían sido bastante más sencillas. Mi mamá bañaba a Kía, a veces se la bajaba toda la mañana, ella nos cocinaba y comía con nosotras, me ayudaba a bañar a Laia y si le pedía que se bajara a Kía, se la bajaba.
Desde el sábado le entré a la maternidad de lleno, pero todavía era fácil, pues papá estaba aquí. Hoy fue que empezó lo bueno!!
Al despertar, le doy de desayunar a Kía, generalmente Laia me da chance de prepararle y se despierta para que a ella también le de desayuno… Se duerme Laia, Kía sigue desayunando (come poco, pero en pasos). Hago “algo”, ya sea jugar un ratito con Kía, aunque todavía no le sigo el ritmo, poner ropa en la lavadora, tender, recoger, etc…
Despierta Laia, toma teta, se vuelve a dormir y mientras a Kía le puse El libro de la Selva.
Vuelve a despertar Laia, esta vez si despierta de adeveras, la encuero y la pongo a tomar su bañito de sol. Mientras lleno su tina de baño, preparo su ropa, recojo aquí o allá. Y en el inter, bajo a Kía de la cama, le pido que no la bese tan fuerte, le digo que a Laia no le gusta que le jalen el pie, me desespero por que ya le puso la cobija en la cara, la reprendo por aventarle el peluche. Pero no crean que mi hija es malvada con su hermana, no, no, no. DE hecho la ama. Lo que pasa es que es un amor apache. Se sube a la cama por que quiere verla, la besa fuerte por que está eufórica, le jala el pie por que le va a poner crema, le tapa la cara con la cobija, por que encuerada, ¿cómo no le va a dar frío?, le avienta el peluche, que trajo desde su recámara para que juegue con el. Me da una ternura mi niña grande. Todas son muestras de cariño, a su modo, sin medir su fuerza, pero desborda amor por todos los poros de su piel.
Bañamos a Laia, Kía subida en la tina grande, ayudándome a echarle agua, pasándome el jabón, tallándole con la esponja. Laia llora cuando la saco y llega el momento de vestirse. Le pido a Kía el pañal que se me olvidó traer, mi hija me lo trae.
Laia llora desesperada, me siento a darle teta mientras Kía ve Mickey Mouse.
Laia sigue despierta, pero tranquila. La acuesto en el bambineto. Kía tiene sueño, está nefas, pero no se va a dormir, además está puerquísima de haber jugado con la tierra mientras yo tendía ropa.
La meto a bañar dejando a Laia acostada y bien despierta… ME siento terrible.
ME baño rápido y baño a Kía. Imposible conciliar cuando ya está con sueño. El drama.
Salimos de bañarnos. Laia sigue despierta, mirando a la nada, acostadita ahí… sola.
Se me parte el alma. Me siento mala madre, tan descuidada. A Kía jamás la dejé así.
Solo le pongo pañal a Kía, nos sentamos en la cama y agarro a Laia.
Le doy leche a Kía mientras Laia toma teta. Laia se duerme, pero Kía no puede, empieza de desesperante, a lloriquear, gritar y quejarse. Laia se queja desde el bambineto.
Al fin, después de mucho lloriqueo y palmadas en la espalda, Kía se duerme. 5 minutos para mi!!!!! Si, claro… Ya no hay chef, hay que hacer la comida. Sacó del congelador una tinga que preparé antes del parto. Que inteligente soy!!
A Laia se le desprende un pedazo del cordón umbilical, le sangra poquito, y le queda unido por un pedazo aparentemente vivo, entro en pánico. Le hablo a todos los dres que conozco. La dejo solamente en camiseta para que nada le toque el cordón. Finalmente me quedo tranquila.
Ahora si, logro descansar un poco, en algún momento me quedo dormida con Laia pegada a la teta. Despierta Kía y yo no quiero abrir los ojos. Hasta que se trepa en mi para alcanzar a darle un beso a su hermana.
Me levanto a regañadientes. Dejo a Laia acostada y nos vamos a la cocina. No pasan ni 2 minutos cuando Laia ya está llorando. La llevo conmigo a la cocina, quiere teta. Le doy a Kía una naranja, mientras Laia toma teta.
Termina, la acuesto en la sillita. Preparo una sopa rápida, caliento frijoles de lata, hiervo la tinga. La comida está lista!
Kía no quiere comer, le doy en la boca y se lo come bien… Muero de hambre, pero le sigo dando a Kía en la boca.
Logro que siga comiendo sola. Me sirvo y disfruto mi comida. Muy buena la verdad! Kía termina de comer, quiere que la baje, pero yo todavía no acabo de comer y Laia está en el piso, si bajo a Kía la va a querer agarrar. La distraigo con miles de cosas hasta que termino de comer. Le prometo ir al parque. 
Las preparo a las 2. 1 hora sólo en poner tenis, sweateres, ir al baño, envolver en cobija, preparar pañalera.
Antes de lograr salir, tenemos que hacer una parada técnica en casa de mi mamá por que Laia tiene hambre. Termina antes de que Kía logre ponerse hostil.
Me enrebozo a una, agarro de la mano a la otra, y ahora sí! A la aventura.
Logramos llegar al parque sin mayores incidentes. Me encuentro con 2 vecinas que creen que sigo embarazada por que solo ven el bulto al frente. Les enseño a mi tesoro y se sorprenden y me reprenden por estar fuera teniendo sólo 9 días de parida.
Kía corre, juega, ve perros, persigue gatos, agarra tierra y yo reprimo las ganas de prohibírselo. 
Vamos de regreso. Nos encontramos a una vecina que le hace fiestas a Laia. Tras despedirnos Kía se va toda serie en sentido contrario…. Voy por ella y la abrazo. Vamos brincando de regreso a casa.
Jugamos en la arena. Laia toma más teta y no me doy cuenta cuando Kía se quita los tenis (más no los calcetines) y se mete al “arenero” de 50 cmts de diámetro.
Llega a visitarnos una amiga con su bebé y su esposo. Le trajeron un detallito a Kía!! Es lo que más les agradezco.
Platicamos muy a gusto mientras los niños se van quitando el rebozo. Cuando se tienen que ir ya son grandes cuates!
Nos preparamos para la hora de dormir. Kía se come una galleta, no quiere comida “saludable”. Laia toma teta mientras papá carga a Kía. Hago eructar a Laia, cuando de pronto, veo que tengo sangre seca en la teta. Miro el cordón de Laia y ya se desprendió!! Tiene poquita sangre… Que horror!! Por que tener hijos es tan angustiante?? Mi mamá sube, piensa que está dentro de lo normal. Le hablo a la dra. y me dice que hacer. Le ponemos el algodoncito y yo sufro de pensar que le duela.
Le pongo a Kía micropor en el ombligo para que esté igual a su hermana.
Acuesto a Laia. Empiezo a preparar a Kía para dormir. Se queda con papá jugando en la cama, mientras yo ceno parada. 
Papá entra al baño, alisto a Kía y empezamos a platicar bajito y suave. Sale papá del baño, carga a Kía, entro yo.
Salgo y Kía quiere que la cargue. LA cargo y no la aguanto. Cuando creció tanto??
Nos acostamos y después de mucho y muchas palmaditas se queda dormida.
Laia despierta, toma teta y se vuelve a dormir. Son las 11 de la noche y al fin tengo tiempo para mi. Termino de escribir este post a las 12:10. Después de dejarlo para volver a amamantar a Laia. Me caigo de sueño, pero si no es ahorita, cuando??
Fue un día muy pesado, pero vale la pena. Sobre todo vale la pena cuando escucho a Kía correr al primer llanto de su hermana gritando “que pashó bebé?? que pashó Lala??” O mirarme con cara de “mala madre” cuando estamos las 2 en el baño y Laia despierta llorando. Mientras sale disparada gritando “epetó, epetó!! Ya, ya Lala”
Que bonito es tener 2 hijas. Que bonito es tener 2 muñecas!!


5 comentarios:

  1. No pensé que fuera tan complicado... aunque hermoso! complicado.
    Yo no veo a ninguna "mala mamá" por aquí, al contrariooo, creo que el papel que le tocará a Laia será muy diferente del que le tocó a Kia, tiene sus ventajas y sus desventajas. A Kia le tocaron muchas antenciones y el centro de atención siempre, porque las circunstancias asi lo permitieron, pero aunque la llevas al parque, sales con ella, juegas, no tuvo a alguien de planta con quien compartir. Por otro lado Laia cuando ya pueda jugar será felíz al lado de Kia, tendrá su hermana mayor que le enseñará a jugar a la comidita o a las princesas.
    Te felicito por la forma en la que estás llevando tu maternidad, de verdad que se dice fácil, pero ya leo que no lo es...
    Toma vitaminas!! y cuídate mucho.
    Besos a tus princesas.

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  2. Gracias por tus palabras Nyd... tienes razón en muchas cosas, aunque es no quita que me sienta algo mal cuando la veo despiertita y no estoy jugando con ella....

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  3. OK, ahora si sentí pánico.
    Recién encontré ayer tu blog y lloré con el hermoso relato de tu parto. Hermoso!!!!
    Hoy lloro, del susto, con el relato del día a día!!

    Impresionante lo que logras!!!!

    Ánimo, el post parto siempre es un poco caótico!!

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  4. woow es fascinante esto de las muñecas de a deveras y mas facinante como nos vamos transformando gracias a ellas


    y bueno tampoco puedes dejar mugrosa akia por no despegarte de laia asi es la vida

    gracias por compartirnos tanto y para que nos preparemos las que queremos otra otra otra!!

    u otro O_o besos a tus nenucas

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  5. Estuve al bordo de las lagrimas de tanta ternura reflejada en Kia, protegiendo a su hermanita y asumiendo su papel de hermana mayor...
    qUE BELLAS muñecas tienes, te mando kilos de energia..

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